sábado, 30 de enero de 2010

Paloma MOZO: consagración de una gran actriz a través de la interpretación gestual.

Paloma Mozo: la consolidación de una actriz a través de la interpretación del gesto.

La interpretación del gesto es descubrir este lenguaje teatral para poder aplicarlo a la interpretación personal. Y eso lo hace hoy día como nadie la actriz Paloma Mozo. Paloma Mozo trabaja el lenguaje gestual que nace de su propio cuerpo y de su propio rostro, un método que la permite emplear la expresividad de su imagen como un código que va más allá de las palabras del texto que dice, y que incluso ella es capaz de incorporarlas de modo equilibrado en el hecho escénico.

Paloma potencia su presencia de actriz en la escena y nos hace conectar con su mundo interior en el acto teatral representado ante el público. Parte de su espléndida figura y cuerpo escénicos como herramienta no sólo de comunicación sino también de creación teatral y catártica; es decir, como motor del juego teatral. Paloma Mozo crea sus personajes desde su estilizada fisicidad y el brillo de su espléndida mirada; en definitiva, de su presencia escénica. Paloma profundiza sobre la veracidad de la expresión teatral y el diálogo con el espectador a través de la proyección y focalización del mensaje de sus gestos, sobre todo de su rostro y de sus ojos.. Despierta las posibilidades expresivas del gesto en cada una de sus interpretaciones, permitiendo de este modo poner al servicio de la escenificación todas sus herramientas corporales.

En sus excelentes interpretaciones últimas (Olga, la esposa de Chéjov, en Chejov en el jardín de Luis d'Ors y en el papel de Beatriz en el shakespeariano Mucho ruido y pocas nueces, dirigida por Ainhoa Amestoy, hay una incesante confrontación entre el desarrollo escénico, que nos es mostrado, y el comportamiento psicológico que delatan sus gestos en la escena. El gesto remarca el texto o dice muchas veces lo que no dicen las palabras y va más allá del texto o del diálogo. Así pues, estamos ante la consolidación de una gran actriz a través del gesto.

lunes, 25 de enero de 2010

CALENDARIO 2010 "EL AMIGO DEL DESIERTO". Enero. Texto: Pablo d'Ors.


ENERO

Cuando digo que amo el desierto, ¿qué digo

estar amando? ¿La arena ardiente por el día y

helada por la noche? ¿Las muchas y variadas

formas de las dunas?

¿El cielo estrellado

y la luna

enorme?

El desierto es

la metáfora

del

infinito…

viernes, 22 de enero de 2010

LA ALEGRÍA DE VIVIR DE LOS IMPRESIONISTAS DE MAPFRE Y EL CRIMEN DE PICASSO

En la FUNDACIÓN MAPFRE DE MADRID se acaba de inaugurar una gran exposición IMPRESIONISMO. UN NUEVO RENACIMIENTO DE LA PINTURA que ha hecho disfrutar a todos y levantar el ánimo a los más depresivos y mirar la vida como un regalo de alegría y optimismo: la joie de vivre, la alegría de vivir. ¿Qué consiguió el Impresionismo? Que incluso a los no amantes de la pintura y a los no entendidos del arte les gustaran, les encantaran y les deleitaran las pinturas de los impresionistas.

Los pintores impresionistas se aproximaron a la naturaleza, llegando a pintar al “aire libre” y a prescindir de los tonos heredados del academicismo (negros, marrones oscuros). Buscaron también una pintura verdadera, que reflejara el instante, entendiendo por tal, la conjunción del tema, la luz, los valores atmosféricos del instante, valorando no el relieve si no el destello, lo cual les condujo con frecuencia a cierta disolución de la forma en el color, en la luz y a casi siempre dar una intensa vibración a los tonos que les condujo a un nuevo Renacimiento de la Pintura y, sobre todo, a una visión del mundo y de la vida como "alegría de vivir".

La técnica impresionista trata de plasmar la impresión coloreada, la sensación que recibe el ojo al contacto con la luz.

Los impresionistas tratan formas y colores a partir de la visión directa, intentando desprenderse de convenciones aprendidas. Para ello utilizan una técnica de pinceladas cortas y perceptibles, de pequeños puntos y comas. La luz, que baña todos los objetos, disuelve los contornos.

Como lo que a estos maestros impresionistas les interesa es el haz vibrante de las cosas, sus cuadros carecen de un asunto principal, no existe un tema grave o principal o una filosofía en común entre ellos. Esta es una gran diferencia con la pintura anterior, no hay selección de tema, todos los campos, todos los rincones urbanos o naturales pueden ser tema de tratamiento artístico, porque todos están modelados por la luz, que es el protagonista único de sus obras.

Sus obras marcan un deseo por agradar al observador, por representar motivos amables, tomados de la vida cotidiana y desprovistos de cualquier carga de dramatismo, siendo su principal preocupación el estudio del paisaje y de la figura humana dentro de este paisaje sometida a los diferentes efectos de la luz.

Hay en los impresionistas un interés por la representación de nuevos temas, absolutamente ajenos a las grandilocuentes composiciones históricas que promovía la academia, en él el tema parece surgir de una sintonía muy personal con la alegría de esos personajes de procedencia modesta que acuden los días festivos a lugares de esparcimiento muy populares. El optimismo que transmiten en sus obras hace que personajes y paisajes se integren en un todo amable, carente de transiciones bruscas.

La captación de los efectos que la luz produce sobre el cuerpo humano es una preocupación constante en la obra de los impresionistas. La introducción de personajes en la vegetación les sirve para componer una vibrante armonía de sombras coloreadas.

¿Qué pasó después de esta alegría de vivir? Que llega Picasso, descoyunta la representación figurativa, descoyunta el arte, lo quiebra, lo resquebraja, lo descompone a cuchilladas y comete un crimen. A los cubistas con Picasso a la cabeza, se les unen los expresionistas con su visión angustiosa, negra y existencial de la vida y matan la alegría de vivir de los impresionistas. Y un nuevo pesimismo invade al espectador de la pintura.


jueves, 14 de enero de 2010

HA MUERTO ERIC ROHMER, NARRADOR CINEMATOGRÁFICO DEL ALMA FEMENINA


A mi hermano Yuge,
amante como yo del cine de Rohmer.


Ha muerto Eric Rohmer, un cineasta cuyas películas penetran silenciosamente y certeramente en nuestra psique mientras las vemos. Sobre todo ha sido un admirable narrador cinematográfico del alma femenina, aunque en dos de sus mejores películas El amor después del mediodía y Mi noche con Maud desarrolle y analice también el alma masculina que es, en el fondo, según él, mucho más simple que la femenina.


Rohmer es uno de los directores (Renoir, Fellini, Truffaut, Tati, Wenders, Jarmusch) que más han marcado mi sensibilidad y más han influido en mi visión cultural del mundo. Creo que ha representado junto a Truffaut la esencia de la Nouvelle Vague. Pero incluso su sencillo pero profundo discurso cinematográfico -si bien tal vez menos rico y entretenido- ha devenido de más calado psíquico que el de Truffaut. Sus películas más aparentemente intrascendentes, -La panadera de Monceau, Les rendez-vous de Paris, Cuatro aventuras de Reinette y Mirabelle y Cuento de verano- son mis favoritas, aunque también me entusiasmaron L'amour l'aprés midi, Ma nuit chez Maud y La rodilla de Clara.


Nos comprometemos, representamos e incluso desarrollamos expectativas al ver cómo se conducen los protagonistas de sus películas. Uno espera la frase que vendrá no por un asunto del ritmo o de la acción correspondiente, no por una posible revelación, ni siquiera por descubrir quién es verdaderamente ese hombre o esa mujer. Pero no hay suspense pero sí máximo interés y penetración en lo que dicen y en las inquietudes psicológicas de las criaturas de sus films. ¿Cómo lo expresa? Eric Rohmer lo hace con una infinita ternura hacia esos seres que habitan el mundo que construye.


Los cafés, las plazas, las calles, e incluso los barrios en donde se insertan, las playas, los lagos y el campo constituyen los escenarios que soportan las puestas en escena en donde se muevan los jóvenes y, sobre todo, las dulces actrices (Michéle Girardon, Haydee Politoff, Françoise Fabian, Laurence de Monaghan, Beatrice Romand, Zouzou, Amanda Langlet, Marie Riviere, Pascale Ogier, Joëlle Miquel, Anne Teyssèdre) que desfilan por sus películas. Contar quién se es y qué se quiere no requiere especiales argumentos o acciones complejas. Las posibilidades de encontrarse y buscarse las mujeres con los hombres y los hombres con las mujeres, de toparse en la calle, de sustituir la mirada por la palabra o éstas por aquellas, de ver al otro con o sin uno, todo ello constituye el mensaje y el testamento cinematográfico de Rohmer. Que las confesiones se hacen caminando juntos, y que juntos se toman las decisiones que cambian nuestra vida.


Se ha ido Eric Rohmer, pero no las imágenes de esos dos jóvenes Gaspard y Margot que hablan sin parar en una playa de la Bretaña francesa en Cuento de verano.






Publicado por Carlos d'Ors

martes, 12 de enero de 2010

Mauricio d'Ors: EL OJO DEL FOTÓGRAFO (El Blog fotodiariosinpalabras.blogspot.com)




















Mauricio d'Ors : EL OJO DEL FOTÓGRAFO.

Todos los días me desayuno con el Blog fotográfico
http://fotodiariosinpalabras.blogspot.com
de mi hermano Mauricio d'Ors,
que es un dietario de fotografías en blanco y negro
(y con todos los matices de grises que queramos),
sugerentes, bellas, de poéticas
y nostálgicas luminosidades
y de una sencillez casi minimalista, a veces,
pero muy elocuentes y misteriosas casi siempre.
Y que nos hacen pensar y sentir.
Pocas veces me resisto a comentar sus fotos.


He aquí el comentario que me sugiere ésta
del día del Pilar, 12 de octubre de 2009:

La mirada lateral de esta dama,

¿será la de aquella misteriosa mujer

que se hallaba siempre junto a nosotros

en el palco de la ópera?

¿la de aquella profesora de inglés

de cuyo nombre no me acuerdo?

o ¿la de aquella tía de la que tanto nos hablaban

nuestros padres y que, finalmente,

nunca vino a visitarnos?...

lunes, 11 de enero de 2010

MEMORIA DE LOS MUERTOS, 2009



MEMORIA DE LOS MUERTOS

Solos, la tierra con sus muertos...

Solos, los cráneos olvidados en el agua estancada...

A oscuras, la memoria es como caballos blancos
que se alejaran en la noche...

Señales, vestigios, huellas de contornos humanos...

jueves, 7 de enero de 2010

¡VIVA EL HOY!

¡VIVA EL HOY!
(Otra vez a mi hermano Alfonso)










Foto de Carmen Ballvé:
Hermanos d'Ors Führer en casa de Esperanza
en la calle Sobradiel, 8, de Madrid.
De izquierda a derecha: De pie, Mauricio, Luis, Alfonso,
yo y Juan. Sentados, Pablo y Esperanza. 5 junio 2009.
En la boda de Ainhoa Amestoy d'Ors, hija de Esperanza.

Querido hermano Alfonso:
Sí; yo me enciendo
con el recuerdo y la añoranza de la infancia.

Pero cerraré las puertas de los recuerdos
que conducen por la escalera a la nostalgia.

Echaré los cerrojos de aquellos viajes infatigables,
de aquellos espacios interminables,
de aquellos tiempos sin fechas ni calendarios
y de aquellas ruedas de molino
que nos hacían comulgar con el viento
de la infancia.

Y con sonrisa nueva, franca y ligera,
dejaré que el frescor de cada mañana
suba por mi escalera
y acaricie mi espalda.



Evocación del Día de los REYES MAGOS

Evocación del Día de los REYES MAGOS,
6 de enero del 2010


Tras degustar el chocolate espeso de Gabriella calentito,
y las deliciosas de Alfonso y Espe, cocas,
y el tierno pan d'oro que se derrite en nuestras bocas...

Salimos a la escalera para el rito cantado,
cada año repetido:
Los Reyes Magos han venido,
y mil juguetes han traído,
Los Reyes Magos han llegado,
y mil juguetes han dejado...

Los hermanos, cuñados, sobrinos, yernos y ahijados,
y la adquisición de una preciosa Andrea, de ojos redondeados,
por fin, en fila, todos por orden cronológico, alineados,
vamos descendiendo poco a poco, la escalera blanca de Mirto,
hasta el teatro subterráneo...

En el oscuro teatro,
tras de unas escaleritas bajadas prudentemente,
un gran espacio de ilusión delante, mágicamente
en donde paquetes de color,
esperan ser abiertos inmediatamente...

Y bajo pálidas bombillas de colores,
con nuestros fríos calcetines tocando el suelo enmaderado suavemente,
el inesperado gozo que nos otorgábamos pródigamente
con el soplo continuo de nuestros regalos y conversaciones, cariñosamente...


Van saliendo de sus cajitas, los animalitos, traviesamente
mientras los delicados pajaritos de colores en sus circulares esteras,
aguardan pacientemente ...

Y los jerseys, camisas, bufandas y gorros,
que, de repente, colocados,
emergen de los cuerpos, rápidamente...

Y un mágico reloj para bucear profundamente
en los abismos del hallado amor constantemente...

Y los extraños juegos, que nadie sabe a cómo se juegan,
y el "consolador" de té para consolarnos del frío invierno,
y los libros de amor que Luis nos desea...

Y los escondidos calendaritos,
y los grandes calendarios de la Gran Vía centenaria
para el nuevo año que comienza...

Y, al fin, el queso parmesano, ¡Viva Italia!
que en nuestros paladares
este año 2010 queda...

miércoles, 6 de enero de 2010

INFANCIA OLVIDADA, 2005 (del poemario inédito"PAISAJISMOS").



Con mis hermanos y primos en la hamaca de Carballedo de Galicia, en 1958.









INFANCIA OLVIDADA, 2005
(a todos mis hermanos y primos, pero especialmente para mi hermano Alfonso)

Instalados en lo laico de nuestra madurez,
alejados tanto del aura de nuestra niñez,
¿es posible aún reencontrar
el misterio de todas aquellas cosas
que emergían de nuestros pozos sin fondo?

¿Rememorar con los flashes de la memoria
aquellos paisajes, aquellos retratos,
aquellas escenas de interior o al aire libre
de nuestra infancia olvidada?

¿Es posible volver a escuchar el eco
de aquellas voces dulces, serenas o fuertes
que emitían maravillosos mensajes de amor,
cuentos de ansias hechas realidad,
atractivas órdenes de autoridades supremas?

¿Es todavía alcanzable evocar nuestros pasos y paseos?
¿Nuestros andares de peleles, de marionetas sin hilos?
¿Aquellos andares que eran majestuosos reyes,
soldados de instrucción o héroes vencedores?

¿Poder encontrar aquellos tesoros sin precio?
¿Aquel jabón de colores, aquellas piedras de cristal,
aquel trozo de tela o caja de cartón?

¡Ah!, ¡si alguien pudiera devolverme acaso
mi añorada infancia perdida y olvidada!











domingo, 3 de enero de 2010

EL PARAÍSO PERDIDO DE LA INFANCIA.

Es muy cierto lo que se dice de que el abrigo de la Infancia crea con los años, por contraste, la sensación de intemperie y de inseguridad.

Yo soy el del triciclo a la edad de tres años, el 6 de enero de 1954, día de Reyes, con mis hermanos Alfonso, el de la cama, Mauricio, el de la bici, y Esperanza con sus muñecas en nuestra casa de la calle Quintana, 23 , 1º dcha de Madrid.

La vida se convierte en una nostalgia de la dulzura perdida, de la felicidad robada.
De la Primera Infancia me ha sido imposible retener recuerdos precisos y concretos... Eso aumenta probablemente el encanto de la época de la Infancia como Paraíso Perdido.